domingo, 24 de diciembre de 2017

¡Jallalla CARAJO!

Con un sentido abrazo a cada uno, apenas nos vio, modificó toda la situación y el contexto.
Como si nos conociera de toda la vida, nos guió hacia un adentro exterior, hablando y haciendo pases mágicos con las manos, la sonrisa, la mirada…

Después de eso el encierro se hizo patio y el patio mesa familiar y enramada criolla con niños jugando a tener abuela, y la enramada cobijó guitarras contravencionales para liberar palabras de pecho, lágrimas de garganta, alegrías de flores en los ojos hondos y fulgores de sonrisas entre gatos y chacareras…

El pasto pisado y zapateado se mezcló con el recuerdo de picante de pollo que el fondo de la olla porfiaba en expresar, sabiendo que esa comunión de olores hace  a los patios (la frontera del patio no es un alambrado ni una tapia, es siempre un perfume, la mirada que se le fugó a un gesto, un aire que anda buscando ser entonado)… y en medio de ese perfume vivimos de nuevo la bloquera de cemento produciendo incansable para que las compañeras y compañeros levantaran su casa con sus propias manos, el parque acuático con el piberío gozoso, el templo Kalasasaya con la gravedad de los vínculos ancestrales, embebidos de la hospitalidad que albergan los corazones fuertes y a la vez, tan dados a la caricia …

Nos fuimos entendiendo que el encierro es real porque es real lo construido, y que la libertad es perentoria por la cobarde destrucción enseñoreada (así en la provincia como en el país). Cada niña, cada niño con discapacidad atendidos en el Cemir, cada sueño que se animó a cobrar vida en la “Copa de leche”, cada persona que gracias al trabajo comunitario, se contempló en su verdadero tamaño, es ahora, otra vez, un pendiente… Algo por hacer nacer de nuevo.

Y hacer algo concreto –llevarlo de la idea a la realidad–  no depende sólo de lo material. Milagro lo sabe, por su raza, su género, su nombre… Y su experiencia.
La frontera del encierro no es una reja, un alambrado, una tapia… es el miedo y la melancolía, la indiferencia de los tantos.
La dimensión del odio empequeñece al gobernante y al guardia cárcel, en esa debilidad se agazapa nuestra esperanza…

El gesto de saludo que se le escapó a Milagro desde una distancia hostil para las cámaras, es un pase mágico para el pueblo argentino…
Lo sabemos los trabajadores y trabajadoras, los y las estudiantes, todos y todas las que andamos de a pie y sentimos el pulso violento de estos días. Las injusticias padecidas solo agregan legitimidad a nuestra lucha.
Volveremos, porque en esta situación, además de resistir, es lo único que sabemos y podemos hacer.


lunes, 9 de octubre de 2017

A Tarascón, nieto de MORDISQUITO



Lo que pasa es que a vos Tarascón, digno nieto del ortiva Mordisquito, y de su mismo pelaje te gusta la gente de mundo. Vos te sentís ciudadano del mundo y te encanta. Sobre todo cuando pensás en Miami o Barcelona. De Siria seis años bombardeada, Libia en guerra civil, desde que mataron a Gadafi o la Corea del Norte que ahora tiene poderío nuclear, preferís no acordarte. Ese no es el mundo… o en todo caso, sigue siendo el mundo que tutela para los yanquis y demás garcas como vos, el imperio americano y su super-poderoso y ultra-glamoroso ejercito con el más letal y estrafalario poder de destrucción que haya existido antes sobre la faz de la tierra. 
Si, esa parte también te encanta. Lamer la mano del amo que azota el látigo… y el látigo también.
Hay tanta gente que se ha deslomado para llevar adelante su existencia, que nació en la pobreza y que sin embargo, aun habiendo tenido que robar para darle de comer a su progenie, no perdió nunca la dignidad. ¡Ah! Acá se te van a quemar todos los papeles, vos no lo vas a entender… Te explico, porque a los aspirantes de espléndido como vos, los han educado bajo la sacralidad de la propiedad privada. Pero a los privados de toda propiedad, les sucede cada tanto que se tienen que retobar y salir a llenar de prepo un carrito de supermercado o matar alguna gallina para darle de morfar a los suyos… Y ese riesgo lo corren con vergüenza pero por responsabilidad. Vos no vas a entenderlo pero la dignidad es resultado de cierta propensión al sacrificio, y creo que todos estos términos, para vos, están apenas relacionados con la arenga que tus viejos te hacían cuando comparaban sus tiempos con el tuyo. El sacrificio para ustedes es el modesto esfuerzo que hacen para “hacer carrera” y seguir perpetuando el tiempo de injusticia social generalizada.
Ya ves que yo te explico con paciencia, pero la verdad es que no me como esa de que lo importante es el diálogo, no querido. Vos le llamas diálogo a los enunciados de ustedes sobre nuestra claudicación. Le pusieron un nombre a todo y lo pronuncian con una sonrisa falsa. Han inaugurado una nueva fase en el ámbito de los modales, son tan delicados cuando anuncian que las tarifas aumentaron y seguirán aumentando, tan pulcros cuando casi admiten que salen de cacería en las manifestaciones, tan calmos cuando renuncian a toda soberanía…
Y no paran porque, por ahora, les da buenos resultados. Y es que en el fondo nuestra gente es más buena que el pan… pero hasta los buenos reaccionan ante el engaño, la estafa y la injusticia.
Sigan abusando y entonces, la mueca sonriente de la gobernadora de la provincia de Buenos Aires, puede trabarle los músculos faciales y cuando diga “hablar mirándonos a los ojos” tendrá que agregar “bueno disimulá que se me cae la baba porque no puedo cerrar la tarasca”. ¡Ay! Tarascón
Porque la posta, Tarascón, es que si hablamos mirándonos a los ojos no necesariamente nos decimos la verdad. La verdad para ustedes es que no se bancan que los recursos, la guita bah, se reparta mejor. A eso le llaman asistencialismo y es como la peste para sus oídos y sus bolsillos acostumbrados a disponer a favor del que más tiene, la teta del estado. La verdad es que doce años de gobierno peronista de Néstor y Cristina Kirchner, que ayudaron a jubilarse a un montón de viejos que después de trabajar toda la vida estarían en la más puta miseria, te jode. Te jode que los pibes del pobrerío recibieran las computadoras gratis en sus escuelas para comprobar que las capacidades son similares si de verdad, una vez, igualan las oportunidades…
Porque yo crecí escuchando ese estribillo de mierda: que las oportunidades son las mismas para todos. Mi profesora de historia en el secundario, lo declamaba por ejemplo y que dependía del esfuerzo personal… y bueno y de la suerte que uno tuviera en la vida… (Pobre, andá a explicarle que si cree en el factor suerte su lema se vuelve absolutamente inútil…)
Y hablando de inútiles, Tarascón… ustedes se inflaman y dan manija con “las cosas que siempre se hacen mal en este país” como responsabilizando a los políticos, pero todos sabemos a esta altura que el poder lo manejan otros… No, ustedes no, ahí no cabés vos Tarasconcito. Vos no tenes el poder a vos te gusta pretender que perteneces, pero no… Vos sos el idiota útil que replica los argumentos de la clase que detenta el poder y que se satisface con las migajas. Vos siempre has hablado mal de la política y los políticos porque te daba piné, pero ahora que el país es “atendido por sus propios dueños” ahora te interesa la “gestión”, ahora hablas de la corrupción y de ese mal de este país llamado peronismo. Y claro seguís sin entender una goma. Me asalta esa duda de si sos tan imbécil que parecés un hijo de puta o viceversa.
La corrupción, te ilustro, la instalaron a este nivel, los que hoy son gobierno. Más precisamente la mismísima familia del presidente. Fundadores de la legendaria patria contratista que “hizo su agosto” con la dictadura militar. Porque ahí “gestionaban” los milicos pero tampoco mandaban. Y quedó instalado eso de hacer contratos con el estado, no cumplirlos y luego como dijo alguna vez Alfonsín, que no era peronista Tarasca, el deporte de hacerle juicio al estado. Si te informaras un poco mejor sabrías que esa mafia se extiende por todo el planeta y causa mucho más daño en países como los nuestros, los de Latinoamérica. Pero eso implicaría un esfuerzo de tu parte, y vos ya venís de vuelta Tarascón, vos no estás para discutir si el diario miente… Mirá que va a mentir. Lo que pasa que el diario dice cosas que los negros de mierda no se bancan… mejor pensar así para vos.
Y bueno, mirá, te lo acepto, no tenemos porqué estar de acuerdo. Vos me desprecias y yo no te quiero ni un poco. Cuando pienso que sos la piedra que inmoviliza los destinos de la Patria Grande, le  apuesto a alguna plaga que diezme sobre todo al medio pelo, me hago partidario de algún cataclismo… Pero es al pedo, porque eso siempre joderá mas a los que menos tienen. Te lo digo para que veas que no ando con eso de la buena voluntad y la comprensión dialoguista, sobre todo después de que con el diálogo perpetraron una nueva traición sindical en el movimiento obrero organizado argentino. Y para que sepas que vamos a seguir insistiendo en organizarnos solidariamente para, en principio, soportar los embates que esta gestión entreguista y neoliberal va a producir en la gran mayoría de los argentinos, y luego para ver si el movimiento nacional y popular puede volver a regir los destinos de nuestro país, que no se merece esta indignidad con buenos modales…
Ahí veremos el tamaño del desastre que otra vez pagaremos entre todos… Pero mira Tarascón, hablo sólo por mí, si yo te cruzo no te la vas a llevar de arriba. Perdé cuidado

jueves, 27 de abril de 2017

Aspectos de la CULTURA NACIONAL y POPULAR en tiempos del GRAN MACRINAL



Quienes estamos abocados desde diversas áreas expresivas a lo que se llama comúnmente arte popular y tenemos cierto recorrido y experiencia en el trabajo y la interacción colectiva, tanto en la producción de contenidos como en el compartir grupal y festivo de esas expresiones, no podemos menos que ver con desasosiego las políticas que en el área de la cultura en general, y la popular en particular, viene perpetrando, casi impunemente, el gobierno del ingeniero Macri. 

Desde el Frente Cultural Arte Militante tenemos siempre muy en cuenta que popular no es necesariamente masivo, y que cultura popular no sólo tiene que ver con lo que el pueblo consume en términos de bienes y símbolos culturales, sino además y antes que nada, con lo que el pueblo es capaz de producir. Por ello este retroceso en el recupero de componentes identitarios, siempre marginados o negados por la cultura oficial: pura, blanca y occidental que, con la gestión de los gobiernos de Néstor Kirchner y Cristina Fernández de Kirchner, habían vuelto a emerger con y por derecho propio, ampliando los derechos culturales de todos los habitantes del territorio nacional, debe ser señalado con claridad y vehemencia. 

Claro que hay, además muchos otros aspectos favorables que se produjeron en las gestiones mencionadas: la mayor oferta cultural, la mayor accesibilidad para más sectores sociales etc. Pero, sin duda lo más importante es que se comenzó a tratar lo cultural no sólo como el arte-cultura del que gozan y en el que se identifican siempre las élites vernáculas, sino como algo que demanda una política de estado, porque en ello se encuentran y resuelven múltiples afluentes y factores que hacen a nuestra cosmovisión e identidad como pueblo.

Frente a esta otra claudicación vergonzosa de lo propio ante los intereses de un mercado  internacional globalizado, homogeneizado y homogeneizante, que sólo particulariza y desarrolla en tanto halla potencial de mercancía, denunciamos y repudiamos esta nueva edición del cíclico intento de "volver a ser parte del mundo" a cambio de renunciar a ser nosotros.

Esto que resulta indignante para el espacio nacional y popular, es en cambio, absolutamente coherente para los funcionarios de la actual gestión de gobierno, ya que se corresponde con el resto de sus políticas y con la ideología que de ellas se desprende. 
La explica con desenfado un insólito integrante del inefable gabinete de Cambiemos en sendos videos que circulan por las redes sociales. Según el filofilósofo Alejandro Rozitchner, los valores del PRO, son la Cercanía, la Positividad y el Futuro El sujeto político ya no es el pueblo sino el individuo dice. Esto, desde el punto de vista de las expresiones artísticas, niega -porque lo desconoce- como es el proceso de acumulación que se genera previo a la creación de los hitos culturales que identifican a los pueblos. Por ejemplo: no es posible identificar un autor/inventor de esos modos de bailar, de cantar y de ejecutar la guitarra que caracterizan al flamenco y sin embargo, o por eso mismo, es la expresión que identifica y representa al pueblo gitano español Dichos modos se nutrieron durante largos años del aporte de miles de anónimos, antes de que la forma emergiera definiendo y definiéndose en la pertenencia. (Y mucho antes de que el mercado la reconociera como tal). Incluso con nuestro tango, que tiene más identificados a sus autores pioneros, es imposible atribuirle, a uno o varios individuos, la invención de sus características, porque éstas, claramente, emanaron de un colectivo popular con particularidades determinantes y en un tiempo determinado.

Pero el pueblo para el PRO es una abstracción. Luego, sólo producen los individuos. El individuo parece ser tanto destinatario como generador de la positividad de la existencia. Sencillamente, porque sería más fácil convencerlo de que la vida vale la pena. Obvio. La pena que ahora no tiene el pueblo, que aunque no existe, seria sindicado como el responsable de la producción de tristezas y angustias, aparentemente no contempladas ni admitidas en los valores pilares del gobierno de los CEOS.
No hay que preocuparse entonces de la fuente inagotable de versos, cantos, dramas, novelas etc. que identifican a pueblos y naciones, que ya no corporizarán sus pasiones, dramas y alegrías. Entonces, toda instancia institucional, incluida por supuesto la Nación, devendrá una mera entidad aglutinadora de impulsos personales, puesto que solo hay individuos dichosos de vivir, con la libertad de agruparse como les plazca o convenga, y con el deseo proyectado hacia adelante
Adelante, obvio, queda el Futuro. Y el Futuro, todo el mundo lo sabe, es lo que mejor se puede publicitar. Nada tiene mejor prensa que el Futuro en estos días de globos amarillos que se desinflan por todos los rincones. El Presente está en coma cuatro, pero el Futuro ¡ah! ese sí está lindo y goza de buena salud. Ni hablar del Pasado que, como le gusta decir al mismo filo-filósofo es un lugar lleno de muertos. Si cupiera polemizar con tamaño pensador, se podría añadir que el Futuro también está lleno de muertos”… pero bue, no cabe.

Toda esta batería publicitaria, que en el fondo, no es más que un alarde conceptualístico y un burdo intento de resignificación del pensamiento conservador y antinacional, empeñado siempre en la negación de la historia y en apelar a consignas modernizantes para fomentar la dependencia, se vuelve sentido social en las capas más privilegiadas de la sociedad argentina. Son los que están del otro lado de la grieta y los responsables, históricamente, de la existencia de la misma. Para que no hubiera grieta tendríamos que ser un pueblo sumiso, al punto de la semi-esclavitud. Entre ellos, cualquier modificación en el reparto de recursos, que intente favorecer el ascenso social de las capas humildes, es un ataque a la Republica y ahora también, paradójicamente a la Democracia. Diagnóstico que ya heredamos de Don Arturo Jauretche, pero al que todavía no hemos atendido como corresponde.

Por lo tanto y por ridículo que parezca, Rozitchner no habla al pedo. Le habla al núcleo duro de Cambiemos y, siendo un productor de los Cantos de Sirena, que sirvieron para destruir tantos avances y sueños del campo popular, habla también para sus reproductores multiplicadores, que replican el mensaje desde una profunda alienación e inconsciencia de clase no todo difusor de los valores del PRO, está comprometido con los mismos contribuyendo a la disgregación tanto del Pueblo como de la Nación.
Claramente este gobierno milita la dependencia. Toda soberanía es ajena podría ser un lema de campaña para estos buenos muchachos. Los argentinos PRO le sonríen al amo y lucen con orgullo su collar de perro. Olvidados o ignorantes de aquel sentido refrán jauretcheano que recomendaba  dejar de ser perro y no sólo cambiar de collar.
Por eso no debe extrañar que, tanto algunas fiestas tradicionales como diversas expresiones de la Cultura Nacional de la más pura estirpe criolla desplieguen lujosamente sus ornamentos, y convoquen desde una gran parafernalia mediática a consumir una simbología vacía y viciada de productos de feria, tal cual lo plantean los actuales gestores de la cultura. No importa cuál es el contenido sino que sea consumido por muchos.

No obstante, como enunciamos desde el comienzo, nosotros estamos de este lado de la grieta y no alcanzamos a imaginar cómo se las ingeniarán esos individuos con los que a diario tratamos en: centros culturales barriales, talleres de teatro comunitario, centros de jubilados, bibliotecas populares, centros de murga, o murguitas de plaza y baldío, y un largo etcétera, para intentar empatizar con la visión o el cambio cultural del actual gobierno. Los viejos, por ejemplo como producirán sus relatos y versos originales, prescindiendo del pasado ¿O será que hay un rango permitido de aceptación de pasado según el propio individuo? ¿Cómo harán las murgas para cantarle loas al éxito y la realización personales, sin que suene despiadadamente a sátira? Las bibliotecas ¿ofrecerán solo libros de auto ayuda? ¿Habrá ahí disponible alguno de Alejandro Rozitchner?

Más allá del humor como recurso, para que lo dañino nos duela menos, esta nota quiere ser una voz más en el clamor popular. Ante la negación de la historia, de lo comunitario y colectivo, de los derechos históricos, los recientemente adquiridos y los que faltan conquistar; nosotros contestaremos con más conciencia histórica, con más organización popular, con más demandas a la sociedad en general y al estado en particular, por los derechos de todos los habitantes de la Patria, hasta que esta nos contenga a todas y a todos. 

Cae la tarde de abril en la placita María Elena Walsh de Villa Liniers, en Tigre. Los pibes juegan un fulbito y se va juntando la murga para ensayar Uno de los chicos champurrea una frase en la trompeta si la pelota le pasa cerca, se prende corriéndola de atrás, con la trompeta en la mano

Hugo Fernández Panconi
FRENTE CULTURAL ARTE MILITANTE
PERONISMO MILITANTE